Blanca Estela del Rosario Zamudio Valdés.
Magistrada del Tribunal Unitario Agrario 18.
Integrante de la generación de Abogadas Influyentes 2019.
“Las mujeres abogadas tenemos gran capacidad para desarrollarnos en el campo del Derecho, en la materia en la que más nos guste o nos encontremos más capacitadas, todo lo que deseen lo pueden lograr, ya que lo que se quiere se puede.”
¿Cuál es el aspecto que más te inspira de tu profesión?
Poder auxiliar a las personas a que resuelvan sus problemas, que cuando acuden a un órgano jurisdiccional, se solucione la conflictiva y que su familia sea funcional.
¿Cómo ha sido tu desarrollo dentro del ámbito laboral?
Muy gratificante, pues tuve la oportunidad de estudiar y trabajar al mismo tiempo, poder involucrarme con el Tribunal, el manejo de los expedientes me sirvió de gran experiencia. Y de ahí las oportunidades de crecimiento se fueron presentando, en el año 2020 inicié como pasante de derecho en el Tribunal Superior de Justicia, posteriormente Secretaria Actuaria, Secretaria Conciliadora, Secretaria de Acuerdos por Ministerio de Ley, Jueza familiar por oposición.
Menciona los mayores retos a los que te has enfrentado como abogada y qué lecciones te han aportado.
Uno de los retos más fuertes fue el concurso de oposición para ser Jueza, con cuatro hombres y sus comentarios eran muy discriminatorios, inclusive en la segunda etapa del examen, la etapa del caso práctico, uno de ellos mencionó: “no se preocupen, es mujer”, Para su sorpresa obtuve la calificación más alta en las tres fases del concurso y ocupé la vacante de Jueza en el 2006 en el Juzgado Vigésimo Tercero de lo Familiar.
¿Cuál es el legado que como abogada quieres transmitir al gremio?
Las mujeres abogadas tenemos gran capacidad para desarrollarnos en el campo del Derecho, en la materia en la que más nos guste o nos encontremos más capacitadas, todo lo que deseen lo pueden lograr, ya que lo que se quiere se puede. Que no den pasos hacia atrás, siempre hay que dar pasos firmes hacia adelante y hacia arriba.
¿Cómo visualizas el futuro de la profesión?
Con grandes oportunidades de crecimiento, varias abogadas comparten los dobles o triples jornadas de trabajo, al ser madres, esposas, hijas, etc., pero considero que eso no debe de ser un motivo para no desarrollarnos, sino todo lo contrario, debe de ser la inspiración para salir adelante y que el fruto de nuestro esfuerzo y compromiso se vea reflejado en resolver los problemas de las personas que confían en nosotras.
¿Qué consejos puedes ofrecer a las nuevas generaciones de abogadas?
Que nunca se den por vencidas, los caminos de la profesión en ocasiones nos presentan no piedras sino bardas enormes, pero en lugar de detenernos para no seguir adelante, nos dan la fuerza para llegar más alto y cumplir nuestros ideales. Hace 45 años jugaba a ser jueza, tenía un portafolio lleno de hojas blancas y las firmaba como si fueran resoluciones; ingrese a la universidad y cuando ya trabajaba como pasante, observaba a las juezas y jueces con gran respeto y temor a algún día tener que pasar para comentar un asunto. Años más adelante llegue a cumplir uno de mis más grandes retos; el ser Jueza en materia familiar.
“Ser mujer debe de ser la inspiración para salir adelante y que el fruto de nuestro esfuerzo y compromiso se vea reflejado en resolver los problemas de las personas que confían en nosotras.”
¿De qué manera ha modificado la tecnología a la práctica legal, cuáles son sus beneficios y sus desventajas?
En esta pandemia nos pudimos dar cuenta que tenemos a nuestro alcance herramientas muy importantes que no valorábamos, sin embargo, debido a la necesidad de seguir trabajando los asuntos y evitar que la impartición de justicia no se detuviera, se tuvieron que implementar las acciones necesarias para seguir con nuestra actividad. Los beneficios considero que son demasiados, pues al tener que conservar la sana distancia no nos ponemos en riesgo y seguimos trabajando, podemos estar cerca de nuestros familiares, las cuestiones urgentes se pueden resolver sin demora. Las desventajas considero que son solamente de carácter tecnológico, pues si no hay buena recepción de la señal se interrumpe la comunicación, además de que no podemos acercarnos a las personas que queremos.