El hijo de uno de los testigos clave en la trama de corrupción de Odebrecht en Colombia, murió envenenado con cianuro poco después del fallecimiento de su padre, aparentemente por un infarto, informó la fiscalía.
Padre e hijo fallecieron entre jueves y domingo, y aunque en principio se creyó que fue por causas naturales, la autopsia de Alejandro Pizano reveló un presunto envenenamiento.
«Las pruebas recaudadas indican que la víctima habría encontrado el cianuro en una botella de agua saborizada que se hallaba en el escritorio de su padre, de la cual ingirió un sorbo», informó el órgano investigador en un comunicado.
Jorge Enrique Pizano era testigo en la investigación por presuntos sobornos que habría pagado la constructora brasileña para quedarse con la millonaria obra. El exauditor padecía de cáncer y falleció por un aparente infarto, aunque lo ocurrido con su hijo alertó a las autoridades.
La muerte de los Pizano no es el único obstáculo que ha enfrentado esta investigación. A mediados de octubre, la fiscal del caso, Amparo Cerón, sufrió un accidente automovilístico durante sus vacaciones en Chile y pasó varios días en cuidados intensivos.